Limpieza Facial y masaje: secretos para una piel radiante

Si al ritual de limpieza facial añadimos el masaje, los beneficios se multiplican. La limpieza se considera un paso básico en el cuidado de la piel del rostro y es la base de todas las rutinas cosméticas. Siempre debe hacerse de manera respetuosa pero también eficaz y adaptada a las necesidades concretas de nuestra piel. 

La importancia de la limpieza facial

A lo largo del día se va acumulando suciedad sobre la piel. Puede ser de nuestras propias secreciones, como el sebo o el sudor, pero también suciedad del ambiente como polvo y otras partículas y, por supuesto, restos de los cosméticos que hemos ido usando. Sobre todo si hemos usado productos de maquillaje. 

Retirar la suciedad de la superficie cutánea es importante para el cuidado cutáneo facial, en concreto, nos ayuda a:

• Evitar la proliferación de bacterias, éste es el objetivo básico y principal de la higiene tanto facial como corporal.
• Favorecer la luminosidad de la piel.
• Prevenir las imperfecciones, como la aparición de comedones en pieles grasas o con tendencia acneica.
• Preparar la piel para los siguientes pasos de la rutina cosmética.
• Con la limpieza facial ayudamos a eliminar toda esa suciedad y favorecemos la acción de los cosméticos que usamos y mejoramos el aspecto de la piel, que estará más sana, uniforme y luminosa.

Es fundamental que la limpieza facial se realice con productos eficaces, que nos dejen la piel limpia y fresca, pero que, a la vez, respeten la integridad de la barrera cutánea. Éste es un aspecto importante para no pasarnos con la limpieza y asegurarnos de que nuestra piel sigue manteniendo su función barrera. Esto es especialmente importante si tenemos la piel sensible, ya que puede que nuestra función barrera ya esté alterada de por sí.

La limpieza facial según tu tipo de piel

Teniendo presente el respeto de la piel, podemos variar la estrategia de limpieza facial según nuestro tipo de piel. Así, para una piel seca elegir un limpiador suave que no deje sensación de tirantez tras el aclarado, siendo ideal el uso de productos como los aceites limpiadores. 

Por otro lado, para una piel grasa, elegiremos un limpiador algo más potente que reforzaremos con una buena rutina semanal exfoliante. En el caso de la piel grasa, el uso de limpiadores faciales con arcillas, como el polvo limpiador de Oriri, nos puede ayudar a mantener a raya el exceso de sebo cutáneo.

Masaje facial durante la limpieza

Si durante nuestra rutina de limpieza facial usamos productos que nos permitan dar un masaje amplio y consciente, notaremos grandes beneficios tanto por fuera como por dentro. 

Desde el punto de vista interior, cuando realizamos un masaje sobre la piel estamos conectando con ella a través del sentido del tacto, pero también se puede activar otros sentidos como el del olfato si el producto con el que se realiza el masaje tiene un olor característico. 

Nuestra piel está llena de receptores sensibles al tacto y a la presión, que se activan con el masaje y dan lugar a la liberación de neurotransmisores que viajarán al cerebro para hacernos sentir bien. La sensación de tocar nuestra piel y acariciarla a través del masaje nos produce una sensación de bienestar inmediata. Además de la respuesta fisiológica, el masaje nos conecta con el aquí y el ahora. En tan sólo unos segundos podemos sentir una sensación de calma y evasión, y es un gesto simple y fácil de incluir en nuestra rutina de belleza facial. 

En cuanto a los beneficios a nivel externo, el masaje favorece la circulación sanguínea y mejora la penetración de los activos que contienen los productos cosméticos. Si hablamos concretamente de la limpieza facial, la aplicación de los productos a través de masajes circulares mejora la eficacia de la limpieza. Esto es así porque al realizar el masaje pasamos por todas las partes del rostro y podemos hacer mayor hincapié en aquellas zonas que tengan algún pliegue o que sean más propensas a la suciedad, como es el caso de la zona T en las personas que tienen la piel grasa. 

El secreto de la belleza facial

Unir limpieza facial y el masaje es algo fácil y sencillo de incluir en nuestra rutina diaria de cuidado de la piel, ya que sólo nos llevará unos segundos más que si realizamos la limpieza sin ejercer este masaje consciente. Para que este tándem sea eficaz y placentero, dejamos algunos secretos a continuación.

Usa limpiadores que tengan una textura untuosa, como un aceite limpiador o un bálsamo. Este tipo de productos contienen aceites en su base que facilitan masajear limpiador sobre la piel. También hay algunos limpiadores faciales en base acuosa que tienen una textura un tanto gelatinosa y que resultan muy agradables de masajear. Pero si tuviéramos que elegir, nos quedamos con la opción de un aceite limpiador, ya que permite comenzar el uso sobre la piel seca.

Pasos a seguir para un buen resultado

1. Cuando vayas a realizar la limpieza facial, aplica el producto sobre la piel y comienza a realizar movimientos circulares y ascendentes con la yema de tus dedos. Puedes hacer pequeñas pausas sobre los puntos de mayor tensión como en la zona de las sienes, de manera que consigas aflojar la posible tensión y tener una sensación de relax mayor. 
2. Para retirar el producto, durante el aclarado, usa agua tibia para mantener la temperatura propia de la piel. El masaje puede haber generado algo de calor en la piel, por lo que así no se genera tanto contraste como si te aclaras con agua fría. Y, por último, al secar hazlo con pequeños toques, sin arrastrar, para seguir manteniendo el respeto por nuestra piel y esa sensación de calma y paz.
3. Aplicando un masaje facial durante el ritual de limpieza obtendrás resultados duplicados: por un lado, los beneficios de la limpieza facial y, por otro lado, los beneficios del masaje. Sentirás la piel limpia y una sensación de relax mayor pero, además, tu piel estará doblemente preparada para los tratamientos posteriores, ya que con el masaje habrás estimulado la circulación sanguínea de la zona.

Con estos consejos sencillos que puedes aplicar en tu rutina de cuidado de la piel del rostro seguro que consigues una piel radiante y en calma.

Si quieres saber más sobre limpieza facial escucha ahora estos episodios de nuestro podcast:

Episodio 7: Limpiar y sacar brillo:

Episodio 18: Doble limpieza facial:

Escrito por María José Gea, co-fundadora de Oriri.

Fotografías:
Madison Agardi en Unsplash
Cat Han en Unsplash
Vacio Estudio